Los Gouro

Con una población de doscientos mil individuos, los Guro se instalaron al oeste de los Baulé, estos mismos les llamaron Gouro, pero ellos se hacían llamar los Kaweni, Gouro es una deformación de Goura (significaba pueblo cercano a los Baulé) en las orillas río Bandama (Costa de Marfil), una región heterogénea donde coinciden áreas de sabana arbolada con otras densamente boscosas. Pertenecientes al grupo Mande, los Guro hablan un dialecto cercano al de los Dan, los Wa, los Myamu, los Gban y los Yauré. Descienden de algunos linajes Mande que durante los siglos XVIII y XIX emigraron desde el norte y el noreste hacia el territorio que actualmente ocupan, en las regiones bete, baule y malinke. Entre 1906 y 1912 fueron colonizados violentamente por los franceses a quienes se enfrentaron encarnizadamente. A partir de ahí se refugiaron en el bosque abandonando sus poblados para no someterse a la colonización.

No hay homogeneidad cultural sobre el conjunto del país: los cultos, las máscaras, las manifestaciones esotéricas, los bailes varían a veces de un pueblo al otro.

Las máscaras Ripolín

Estas máscaras coloreadas, conocidas como máscaras Ripolín, aparecieron con la llegada de los primeros europeos, los cuales trajeron las pinturas para decorar muebles y casas.

Aunque simbolizan una cara femenina, siempre es bailada por los hombres, se caracterizan por un remate en forma de cuernos (signo de fuerza y virilidad) y una variedad infinita de escenas animalistas: El elefante, el Kalao, etc... , en este caso es un gallo. El gallo en África, representa a un guía de las ánimas en los ritos de iniciación y es ofrenda en muchos sacrificios y diversas celebraciones. Por su obvia vinculación con el amanecer simboliza la victoria de la luz sobre las tinieblas, así como la vigilancia. Por su poderoso instinto genésico es además emblema de fecundidad, de manera que los sacrificios de gallos pasaron a formar parte a formar parte de distintos ritos de las cosechas.